Noé Alcaráz un Charro Muy “Canijo”

Por: MVZ José Alfredo Córdova de la Rosa

    En ésta ocasión platicaremos de un charro que se ha convertido en todo un personaje dentro de los campeonatos nacionales, originario de San José Iturbide, Guanajuato, es visto en todas las competencias que se desarrollan en éstos eventos ya sea lazo en mano para sacar toros reacios a salir del ruedo o blandiendo el azote para producir esos estruendos que hacen que las yeguas huyan despavoridas hacia los corrales.

    Más conocido como “El Canijo”, ha cosechado muchos  triunfos a través de su carrera deportiva misma que inició a muy temprana edad. El trabajo constante con el ganado tanto bovino como caballar le ha dado las facultades para ser considerado un experto en el manejo de los mismos por lo que se ha vuelto imprescindible a la hora de agilizar las competencias.

    Ha formado parte de muchos equipos de fama, por mencionar algunos, Rancho El Soyate, Cuenca del Papaloapan, Rancho El Edén, Tostadas Charras, Valle de Saltillo y muchos otros. Ha sido campeón nacional de pial de ruedo y se ha topado con gallones de la talla de Juan Jaime Muñoz Ledo y Miguel Ángel Vega Guzmán, en charro completo

y también en floreo de salón en varias ocasiones.

    En reciente charla con “El Canijo” le pedimos nos compartiera alguna experiencia vivida durante un campeonato nacional y es la que viene enseguida.

Mi Anécdota de un Nacional.

    Noé Alcaráz “El Canijo” (El de la voz)

 “Una de mis grandes satisfacciones en la charrería fue en 1997 en el  Campeonato Mundial de Charreria que se le nombró allí en Saltillo que organizó el Señor Macario González, un gran amigo y me habló para entrar al manganeadero pero no tenía yo bien definida la mera fecha, me fui de carrera desde México hasta Saltillo, apenas si llegué al lienzo y ya habían competido cuatro manganeadores, en ése momento estaba manganeando Alejandro Pedrero, como ya había empezado pues yo ya no me vestí de charro, cuando me ve Don Macario que se acerca diciendo “Oye pues si te estoy esperando qué haces de civil, a lo que le contesté que pues ya había empezado el manganeadero y que ya era tarde, a lo que Don Macario contestó, vete por tus sogas y vístete y “orita” hago que te esperen.

   Aún faltaban de participar dos manganeadores, uno de ellos era Javier Flores Juárez, en ése entonces se premiaban desplante como quitarse el sombrero, poner la rodilla en el suelo, ya cuando se daba por terminado el manganeadero llegué yo y me tocó suerte de agarrar manganas, me arrearon unos amigo de ahí de Saltillo, charros que yo no conocía, la caballada estaba excelente para manganas, me tocó una yegua muy pesada como de unos quinientos kilos y para mi tamaño pues pensé, a ver cómo la tumbo, afortunadamente me tocó agarrar dos manganas, Javier Flores aunque agarró las tres, me ganó por dos puntos, creo que por puntos malos en una de sus manganas. 

   En esa ocasión si no mal recuerdo fueron doce manganeadores de los mejores que había en ése momento, entre ellos, “Cuquis” Aguilar, Víctor Hugo Flores de Puebla, Alejandro Pedrero, “Chacho Aceves”, “Nito” Aceves y me tocó la fortuna de quedar en segundo lugar

   Es  una de las grandes satisfacciones que tengo en la charrería, que me ha dado y pues me da mucha alegría porque pues todo a la carrera, de improviso y venir en carretera tantas horas me tocó muy buena suerte y esa es una de mis grandes alegrías en éste deporte de la charrería. Noé Alcaráz.

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba